Castros en paisajes de leyenda

Pontevedra es una potencia en patrimonio arqueológico. Sus castros junto al mar y los restos de asentamientos romanos que se conservan nos trasladan en el tiempo para conocer el origen de sus ciudades

 

La provincia de Pontevedra se ha propuesto rescatar del olvido el rico patrimonio histórico y cultural que representan sus yacimientos arqueológicos. Y más allá de los secretos que atesoran, los castreños eligieron para sus poblados lugares altos y bien posicionados que hoy los convierten en excepcionales miradores sobre la costa y el interior de este destino. Estos paisajes de leyenda animan a cualquier visitante a adentrarse en los orígenes de las ciudades de As Rías Baixas, desde las antiguas citanias hasta los posteriores asentamientos romanos.

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  • Santa Trega
  • Castrolandín
  • O Facho
  • Centro Salinae

El Castro de Santa Trega es de los mejor conservados de Galicia, con vistas aéreas sobre A Guarda y la frontera con Portugal. Está datado entre los siglos I a. C. y I d. C. y las primeras excavaciones se realizaron de manera fortuita en 1913. Hoy se pueden visitar dos casas reconstruidas y un museo. Sin salir de O Baixo Miño, la ruta incluye el castro Alto dos Cubos, en Tui, y la siguiente parada ya es Vigo. La ciudad hizo un gran esfuerzo en los últimos años por recuperar el poblado de O Castro y el edificio del Museo do Mar integra los restos del yacimiento de Punta do Muíño do Vento. Merece la pena acercarse a Salinae, con restos de la antigua fábrica de sal junto a la ría, antes de cruzar la puerta de la villa romana de Toralla.

La mejor opción es trasladarse luego hasta Cangas para subir al monte de O Facho, donde se conserva un poblado con vistas únicas a las islas Cíes y A Illa de Ons.

 

Es importante no olvidarse del castro de A Subidá, en Marín, y del de Alobre, en Vilagarcía de Arousa. Resulta obligada también la visita a Castrolandín (Cuntis).

El Castro de Santa Trega es de los mejor conservados de Galicia, con vistas aéreas sobre A Guarda y la frontera con Portugal

Los castreños de As Rías Baixas dejaron muchos poblados abandonados tras la llegada de los romanos, trasladándose a nuevos asentamientos a pie de costa o en valles. En O Salnés se puede pasear por el yacimiento de A Lanzada y el de Adro Vello, finalizando el recorrido en Valga para conocer la historia de A Igrexa Vella .

Puente entre Mediterráneo y Atlántico

Los hallazgos en el yacimiento de A Lanzada atestiguan que la provincia de Pontevedra ocupaba un lugar estratégico en el intercambio comercial entre los pueblos del Mediterráneo y el Atlántico. Las excavaciones desbarataron el tópico de una tierra aislada y acreditaron contactos fluidos con otras culturas desde el siglo VI a. n. e. As Rías Baixas formaban parte de los circuitos comerciales de largo recorrido controlados por cartagineses y, posteriormente, por gadiritas.