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04.SABOREA LAS COMARCAS DE O BAIXO MIÑO Y VIGO

PURO ATLÁNTICO

PURO ATLÁNTICO

Te proponemos una ruta a medida para que disfrutes de unos días inolvidables en As Rías Baixas.

Los museos imprescindibles, los enclaves naturales y patrimoniales de las principales poblaciones y la gastronomía que no te puedes perder.

  • Día 1:
    • BAIONA Y OIA

      • Se construyó en el siglo XII en primera línea de costa. Las continuas reformas aportaron al conjunto elementos arquitectónicos románicos, góticos y barrocos. Destaca su carácter fortificado, pues en el siglo XVI fue lugar de defensa de la costa y refugio de barcos.

      • Poblado rodeado de una muralla monumental situado en una colina desde la que se obtiene un importante control sobre el Atlántico. En el exterior de la muralla se pueden ver varios grabados rupestres con combinaciones circulares incompletas engarzadas unas con otras.

      • Fiesta que promociona el erizo de mar que se celebra en la localidad de Oia en el mes de abril. Se degustan erizos de mar, extraídos de las costas de Oia, crudos, cocidos o a la brasa y acompañados de pan de maíz y vino del país.

      • Montes rocosos junto a la costa cubiertos de matorral bajo, con pinos y robles en los valles. Se extiende por las poblaciones de Tomiño, A Guarda, Oia, Baiona y Gondomar, con puntos como el monte Lousado, el Alto da Grova o A Pedra da Gata, que ofrecen vistas panorámicas de gran belleza.

      • Es un enclave único y estratégico en el que se construyó un faro en 1862 que tuvo que trasladarse en el año 1924 a una posición más elevada. En el lugar también se conservan baterías militares y se sabe que en el año 1949 naufragó allí el navío Thalassa, con pasajeros que huían de la Segunda Guerra Mundial.

      • Declarado Conjunto Histórico-Artístico, recorriendo sus empedradas calles se descubren casonas señoriales, como el pazo de Correa del siglo XVIII, el crucero de la Trinidad, del siglo XV, o la excolegiata de Santa María, de aspecto fortificado y construida en el siglo XIII.

      • El templo, cuya construcción se inició en el año 1287, presenta un aspecto sobrio y fortificado, de estilo románico y con una sencilla fachada en la que destaca el rosetón. Se convirtió en colegiata en el año 1482 aunque en el año 1850 dejó de serlo.

      • Fiesta de Interés Turístico Internacional, celebrada el primer fin de semana de marzo, en la que se conmemora la llegada de la carabela Pinta a Baiona en el año 1493, la primera noticia que se tuvo del Descubrimiento de América. La fiesta llena las calles, con música, mercados y actividades. Se escenifica el relato que Martín Alonso Pinzón transmitió al corregidor de Baiona.

      • Situada en la Casa Carvajal, muestra la evolución histórica, urbana y social de la Real Villa de Baiona, así como el protagonismo de su puerto en las rutas de navegación atlántica. Una de las piezas expuestas de más interés es la reproducción de la carabela Pinta, que, en el año 1493, llegó al puerto de Baiona procedente de América.

  • Día 2:
    • BAIONA Y NIGRÁN

      • Réplica de la embarcación que permanece amarrada en el puerto de Baiona. En su interior se pueden descubrir detalles sobre la tripulación y sobre la carga que llegó a este puerto en el año 1493: metales, plantas, alimentos, animales exóticos…

      • Es el monumento más destacado de Baiona, diseñado en granito sobre las rocas del monte Sansón por el arquitecto Antonio Palacios e inaugurado en el año 1930. Con 15 metros de altura, representa a la Virgen, que sostiene una barca y es un mirador al cual se accede por una escalera.

      • Situada en el puerto de Baiona, controla la entrada a la ría de Vigo. Conserva elementos de época medieval y hasta el siglo XVIII y destaca su monumental muralla de almenas flanqueada por torres y garitas. Actualmente aloja el Parador de Baiona.

      • Paseo, de más de 2 kilómetros, que recorre la península de O Monte Boi, rodea el castillo de Monterreal y transita por playas y calas con vistas espectaculares. Durante el paseo, dotado con área de descanso y miradores, se pueden descubrir baterías militares o percebeiros.

      • Espacio protegido en el que convergen las mareas del Miñor y los arroyos de Grova y Belesar. Es una zona de marismas con una gran biodiversidad. Desde el observatorio de Sabarís se observa una gran variedad de aves acuáticas.

      • Arco de herradura, uno de los pocos ejemplos de arte prerrománico en Galicia que debió de pertenecer a un templo del siglo X que no se ha conservado.

      • Diseño en granito del arquitecto Antonio Palacios edificado entre 1932 y 1937 y consagrado a la Virgen del Carmen. En él se mezclan notas arquitectónicas de inspiración gótica, modernista e incluso musulmana.

  • Día 3:
    • REDONDELA Y SOUTOMAIOR

      • Situado en una antigua fábrica conservera, muestra el patrimonio asociado con la ría de Vigo. La recreación de varias batallas, especialmente la de Rande en 1702, refuerza la importancia estratégica de la ría.

      • Fiesta de Interés Turístico de Galicia que se celebra durante la primera quincena de mayo para promocionar el choco, elaborado según distintas recetas: desde las más tradicionales, como la empanada o el arroz con chocos, hasta algunas más innovadoras, como los chocos con fabes.

      • Montículo que, cerca del río Verdugo, ofrece un dominio visual excepcional de la entrada de la ría de Vigo, de sus riberas e incluso de las islas Cíes. Se halló la necrópolis megalítica de Cortello dos Mouros y la Mámoa do Rei. Fue ocupado por un castro de la Edad del Hierro y, en el año 1477, el obispo de Santiago, Alonso Fonseca, construyó un castillo. Posteriormente, en su cima se construyó una ermita dedicada a la virgen de A Peneda.

      • Situada en el extremo interior de la ría de Vigo, ahora deshabitada, fue declarada espacio protegido y fue escenario de sucesivos ataques piratas y batallas. Fue ocupada por un monasterio en época medieval, por un lazareto en el siglo XIX y por una prisión durante el franquismo. Actualmente acoge un centro de recuperación de la memoria histórica.

      • Casa solariega que se construyó en el siglo XIX sobre los restos de un antiguo monasterio, rodeada de unos magníficos jardines con vistas a la ría de Vigo. En estos jardines se puede admirar un ejemplar centenario Camellia sasanqua ‘Barão de Soutelinho’, considerada probablemente la Camellia sasanqua más antigua de Europa.