La escultura se sitúa en la Concatedral de Santa María, se le atribuye popularmente la victoria sobre las tropas napoleónicas que invadieron Vigo en 1809.
Es un templo pequeño de una sola nave; está construido en piedra, combinando la sillería de las paredes, con la cantería de sus semicolumnas adosadas, que hacen de esquineras. Posee un campanario, cuyas paredes, hacen de muro de carga del tejado.
Joya del románico gallego del primer tercio del siglo XII. Formaba parte de un antiguo monasterio, fundado en 1.154, concebido para albergar en él una comunidad monástica femenina.