Claro ejemplo de arquitectura popular gallega. Es un granero con estructura rectangular de granito y costales de madera con cuatro pares de pies con soportes cilíndricos.
La rectoral de Estacas es un espacio singular que conserva elementos patrimoniales de interés etnográfico y que por su tamaño permite calificarla como pazo abacial, lo que confería al cura un símbolo físico del poder eclesiástico y señorial que ostentaba en su momento, pero lo más destacable es un hórreo de 7 claros aunque se sabe que antaño fue mayor.
Se trata de un conjunto de seis molinos hidráulicos, actualmente restaurados, con una antigüedad de unos 200 años. Uno de ellos, el llamado A Molinera con una rueda vertical.