Un mar de disfraces, desfiles y mucha fiesta
Xenerais, Madamas e Galáns, Meco, Ravachol, Sardiñas, Momo… La provincia se sumerge en el carnaval con cientos de fiestas, desfiles de comparsas y "entierros". Cada Entroido es único. Pontevedra entierra a su famoso e histórico Loro Ravachol, Vigo ajusticia al Meco, Cangas sacrifica al Momo; una larga lista de ayuntamientos (Moaña, Baiona, Caldas, Baiona, Ponteareas, O Grove…) se despide de la Sardiña –en algunos casos precedida del adiós a la Xoubiña, para los niños- ; Salvaterra do Miño entierra, cómo no, a la lamprea; Tomiño a la Taíña… La relación de ceremonias es casi interminable, ya que los carnavales se extienden también a decenas de parroquias que celebran su propia fiesta.
Comparsas, charangas y otras agrupaciones desfilan por las calles y los rincones de As Rías Baixas con su música, sus bailes y su humor, apto para todos los públicos. Y la gastronomía también se viste de gala durante esta temporada. El cocido y el lacón con grelos se convierten en los protagonistas indiscutibles de la mesa, seguidos de otros deliciosos dulces típicos de estas fechas, las filloas y las orejas. Éstos son algunos de los festejos de carnaval imprescindibles en As Rías Baixas.
Entroido de Cobres (Vilaboa)
El tradicional Entroido de Cobres, según escritos de la época, se remonta a principios del siglo XVIII y está declarado como Fiesta de Interés Turístico de Galicia. Madamas y galáns, con vistosas vestimentas, y otras personas ataviadas de blanco, interpretan danzas al son de una charanga. La vestimenta de las madamas , que representan a mujeres de posición social elevada, está formada por un peto repleto de cadenas y otros adornos metálicos, una blusa y una falda blanca, ambas adornadas con cintas de colores y diversas pasamanerías, zapatos negros y un gran sombrero de composición floral y otros elementos.
Los galáns, que escenifican a hombres de alta escala social que buscan pareja entre las madamas, lucen camisa blanca con adornos de cintas de colores, corbata roja, pañuelo de seda que cubre la cintura hasta las rodillas, pantalón blanco, zapato negro y un sombrero de composición floral, como en el caso de las madamas.
El martes de Carnaval, festivo en Vilaboa, tiene lugar la Corrida do Galo, otra actividad destacada del Entroido de Cobres, un evento en el que se respira tradición.
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Os Xenerais da Ulla (Vila de Cruces, A Estrada y Silleda)
Semanas de elaboración y mucho colorido distinguen el vestuario de los xenerais da Ulla. A caballo, estos personajes propios de una de las manifestaciones carnavalescas más tradicionales de Galicia, recorren los municipios, bañados por las aguas del río Ulla, de Vila de Cruces, A Estrada y Silleda. Este tradicional y creativo carnaval forma parte de las Fiestas de Interés Turístico de Galicia.
Xenerais y correos son los protagonistas de la fiesta. La vestimenta de estos personajes parece inspirarse en los uniformes militares. Los jinetes recorren los pueblos a caballo mientras entonan vivas acompañados de un ejército de comparsas y coros. Desde una muy temprana edad los xenerais se enzarzan en estas luchas, en las que nada ni nadie parece estar a salvo: crónicas políticas, amorosas, sociales o de la actualidad localarrancan más de una carcajada al público.
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De Rey Urco al Loro Ravachol (Pontevedra)
El Entroido en la capital de la provincia, Pontevedra, guarda una larga tradición. Durante una semana su variada propuesta atrae a gran cantidad de visitantes. La llegada del rey Urco a las calles de la ciudad anuncia el comienzo del carnaval. Desfiles que llenan de color y música las calles más emblemáticas de A Boa Vila, concursos de disfraces y de filloas, jornadas gastronómicas, parodias en diversos puntos de la ciudad, el desembarco pirata y el concurso de murgas son la antesala perfecta para la cita más importante del carnaval de Pontevedra: el entierro del loro Ravachol.
Ravachol fue un loro que vivía en la antigua botica de la Peregrina , donde una estatua homenajea al personaje en la actualidad. El dueño de la farmacia, Perfecto Feijoo, hombre culto y amigo de las tertulias donde participaban desde Unamuno hasta Ortega y Gasset, se enfadaba con el loro por su lenguaje y descaro. La muerte de este querido pájaro y su curioso entierro multitudinario se representan de forma original y divertida desde 1985 como actos centrales del carnaval pontevedrés.
En una de las localidades de la vecina península de O Morrazo la clausura de estas celebraciones llega el domingo de carnaval con el entierro de otra ave, en este caso siniestra, el llamado Paxaro de Mal Agoiro de la localidad marinera de Bueu.
Entierro del Meco (Vigo)
La ciudad olívica cubre de alabanzas al dios del carnaval, el Meco, con su entronización y su ajusticiamiento pocos días después. Durante el reinado de este dios pagano, representado con un muñeco que cada año adopta la forma de un personaje o elemento de la crónica de actualidad, las calles y las plazas más emblemáticas de la ciudad se llenan de buen ambiente, de comparsas y de mucho jolgorio.
Los maleducados merdeiros, otros de los personajes destacados de este festejo, corren, gritan y saltan con el ánimo de asustar a las y los viandantes; armados con una vara intentan golpear a la gente con la que se encuentran. Hace poco más de una década se recuperó esta tradicional figura del carnaval de Vigo, ya que había sido prohibida en los años 20.
Antiguamente vestirse de merdeiro era una costumbre habitual entre los marineros de la ciudad. El objetivo de este personaje, nacido de la rivalidad existente entre marineros y labradores, era incordiar a la gente restregando a sus víctimas con restos de pescado podrido.
Finalmente, al desafortunado Meco se le quemará y llorará el martes de Carnaval por la noche en la Porta do Sol. Próximo a Vigo, el municipio de Redondela también venera a la figura del Meco, que corre la misma suerte que el de la ciudad olívica. Similar a este último, O Liborio de A Illa de Arousa es un muñeco que adopta una forma distinta cada edición del carnaval, en representación a algún personaje de actualidad, que acaba quemado al calor de la hoguera. O Chapante es otro de los personajes que protagonizan los entierros de carnaval de As Rías Baixas, en este caso, el de Cuntis.
Enterro da Sardiña
La tradición marinera de As Rías Baixas ha propiciado que en muchos lugares de la provincia de Pontevedra el carnaval se despida con el Enterro da Sardiña y otras variaciones. Así, en algunas localidades se incluye el Enterro da Xoubiña para las y los más pequeños de la familia.
Moaña, Baiona, Caldas de Reis, Marín, Cambados, O Grove y Ponteareas son algunos de los municipios que acompañarán a la popular sardiña en su camino hacia la hoguera.
El Enterro da Sardiña sufre variaciones en otros rincones de la provincia, que han bautizado con nombre propio al personaje que termina consumido por las llamas. Momo en Cangas y Vilanova de Arousa, O Berete en Chapela (Redondela) y el Kiko en Nigrán, son algunas de ellas. En Cangas se llevan a cabo durante el carnaval actuaciones de damas y galanes que en septiembre realizan las Danzas Ancestrales de Darbo, declaradas Fiesta de Interés Turístico.
Ligados al río Miño, otros lugares de este destino cambian la sardina por otros ejemplares de agua dulce, como es el caso de Goián (Tomiño), con la Taíña; o Salvaterra de Miño, con el Enterro da Lamprea.
O Grove, Interés Troulístico Internacional
El carnaval de O Grove se ha autodenominado como Fiesta de Interés Troulístico Internacional. Este acontecimiento lúdico del pueblo marisquero comienza con una muestra de la mejor gastronomía local en las cenas de comadres y compadres, antesala para calentar motores antes del Domingo Fareleiro.
El Domingo Fareleiro es una lucha entre titanes en la que las y los fareleiros se encargan de arrojar harina a las y los enfariñados, perseguidos por los primeros para acabar cubiertos de un manto blanco. Finalmente, las y los participantes de los dos bandos acaban rebozados en harina.
No obstante, el gran acontecimiento del carnaval meco es el festival de comparsas, agrupaciones que con su música, danzas y puesta en escena satirizan los acontecimientos del último año. El desfile del martes de Carnaval discurre por las principales calles de esta localidad. El Entroido llega a su fin con el Enterro de Dona Sardiña en el muelle de O Corgo.
¿Realidad o ficción? Un loro con nombre propio, unos jinetes que no dejan títere con cabeza al más puro estilo de las cantigas de escarnio, el Meco que cada año adopta una personalidad diferente, madamas y galáns y el Enterro da Sardiña, se convierten en el centro de todas las miradas durante los carnavales en la provincia de Pontevedra.
El deslenguado loro Ravachol de Pontevedra se ganó la simpatía de las y los vecinos, que acudieron en masa a su entierro. El multitudinario funeral coincidió con los carnavales y, desde los años 80, se revive cada año esta tradición.
Como si de los Jinetes del Apocalipsis se tratara, cada año llegan los xenerais da Ulla a las calles de algunas de las localidades bañadas por el río Ulla. Estos personajes transmiten la crónica local de actualidad de distintas temáticas como la política, la sociedad o el amor, provocando carcajadas entre las y los asistentes.
De la risa al baile al más puro estilo tradicional, galáns y madamas ejecutan las danzas ancestrales y se convierten en los protagonistas del Entroido de Cobres.
Como colofón a esta época festiva y de diversión llegan los entierros a diversas localidades con la quema de figuras como el Meco o la sardina. El primero aparece caracterizado como un personaje ligado a la actualidad, y la sardina es el pescado que se entierra tradicionalmente debido a la cultura de este destino tan arraigada al mar.
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