Arcade, capital de la perla del marisco
El fondo de la ría de Vigo es el lugar por excelencia para el cultivo de la ostra. Arcade, en el municipio de Soutomaior, rinde homenaje a este sabroso molusco el primer fin de semana de abril.
La Fiesta de la Ostra constituye una cita imprescindible en el calendario gastronómico de Galicia. Esta parroquia del municipio de Soutomaior da la bienvenida a una marea de visitantes el primer fin de semana de abril para degustar este exquisito bivalvo. Este manjar se sirve al natural (con unas gotas de limón), en escabeche y en empanada, bien regado con buenos vinos blancos gallegos, especialmente de As Rías Baixas. Música y actividades culturales, entre otras, complementan el programa del multitudinario evento.
Los Austrias y los Borbones apreciaban este manjar, que era transportado a la Corte en escabeche en pequeños barriles de madera
La ostra de Arcade, de la especie Ostrea edulis, traspasa fronteras. Esta zona tiene las condiciones ideales para la cría gracias a la confluencia de las aguas dulces procedentes del río Verdugo con las saladas de la ría. Ese encuentro da lugar a un producto jugoso y de sabor suave que además es muy nutritivo, debido a su riqueza en sales minerales y vitaminas. Y, por si fuera poco, la sabiduría popular le atribuye propiedades afrodisiacas.
Trufa de mar
Esta celebración nació en 1987 a iniciativa del sector ostrícola de Arcade, pionero en la comercialización y exportación de este molusco. Abril es el mejor mes para la degustación de la llamada trufa del mar o perla de los mariscos, de ahí que se eligiera para su exaltación. Su talla comercial, de entre 6 y 7 centímetros, se consigue en menos de 24 meses.
La cría y el consumo de la ostra atesoran una larga tradición en la ría de Vigo. Existe constancia de que la población castreña recolectaba este bivalvo, y su cultivo se remonta a la época de los romanos. Las dinastías de los Austrias y los Borbones apreciaban la calidad de este manjar, que era transportado a la Corte del Reino en escabeche dentro de pequeños barriles de madera; y que, ya en el siglo XIX, se comercializaba en Europa.
Este exquisito marisco cuenta en el centro histórico de Vigo con un lugar de culto, la calle Pescadería, conocida popularmente como Rúa das Ostras y, desde hace décadas, uno de los atractivos turísticos de la ciudad olívica.
La ostra representa un clásico de la gastronomía gallega y va ligada de forma indisoluble a Arcade, capital de este marisco elogiado por Álvaro Cunqueiro, quien escribió: "tiene un sabor especial, que es como una añoranza del mar".