Un pueblo esculpido en granito
Hablamos de un pueblo esculpido en granito, santuario para la nobleza y cuna del apreciado vino albariño, una de las señas de identidad de la provincia de Pontevedra.
Cambados nace de la fusión de tres villas históricas: Fefiñáns, con un marcado carácter noble e histórico, donde los pazos cobran vida; Cambados, con su bellas plazas y calles adoquinadas; y Santo Tomé, de carácter eminentemente marinero.
Aquí se situaba el antiguo puerto pesquero, hoy es refugio para las embarcaciones de pesca artesanal
Una caminata por el paseo de Cambados te llevará hasta la torre de San Sadurniño, en el islote de A Figueira. Desde esta zona es frecuente ver a las mariscadoras recoger las almejas que luego se pueden degustar en las docenas de tabernas tradicionales que te encontrarás en su centro histórico. Sus vecinas y vecinos son también unos maestros cocinando vieiras.
A diferencia del centro, con construcciones más nobles, la presencia de calles irregulares y estrechas nos indica con claridad la entrada del barrio de Santo Tomé, que nos muestra las típicas viviendas de tipología marinera: casas recubiertas de conchas, balcones y galerías convertidas en auténticos miradores hacia la ría de Arousa. Aquí se situaba el antiguo puerto pesquero, que hoy es refugio para las embarcaciones de pesca artesanal.